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LIBRE ALBEDRIO
Saint Germain
Libre Albedrío, es la capacidad otorgada al Hombre que habita la Tierra desde lejanos tiempos, por el propio Creador Universal y le permite decidirse por una u otra acción.
Es nota característica del Ser Espiritual, manifestada en la conciencia de la libertad del propio Ser Humano.
Se trata de un término aceptado por las Escuelas Espirituales Universales en general, como facultad consciente de la voluntad del propio Hombre, para disponer o dirigir libremente sus actos o elegir, de acuerdo a su grado de evolución, la acción correcta o la incorrecta, que corresponde al bien o al mal... Han transcurrido millones de años desde aquel entonces, cuando el Hombre siempre resentido, suplicaba continuamente al Dios Creador la completa libertad para hacer y deshacer, al igual que en otras galaxias dentro de la Vía Láctea, posiblemente otros seres disfrutaban de los mismos derechos. Un buen día Dios, no dudó en conceder al Ser Humano, las legitimidades de libertad que estimaba y anhelaban para subsistir dignamente y a la vez comportarse con más honradez y felicidad, según estimaban aquellos mortales.
El Gran Creador dijo entonces al Hombre: - ¡Voy a concederos el Libre Albedrío que tanto suplicasteis! Continuó Dios manifestándose: - Atended lo que os digo... cuando y por tercera vez se alcen en luchas y conflictos las religiones unas contra otras, instituciones creadas por vosotros mismos, arrebaten los odios mutuos e intentéis eliminaros recíprocamente, anularé para siempre aquella libertad, que decíais precisabais para vivir tranquilos y felices, cuando en realidad no era cierto.
Sin embargo, antes, enviaré a la Tierra a mi Hijo predilecto.
Nacerá en Tierras por mí seleccionadas.
Aquel territorio luego, y me consta, lo trataréis injustamente y comprobaréis la miserable manera de actuar de vosotros mismos, que después de adorar a mi Hijo y Hermano vuestro, mimarle y seguirle, le entregaréis a vuestros propios enemigos por cuatro miserables monedas, y luego le crucificaréis y su muerte será la más injusta, espantosa y apocalíptica que jamás ser humano alguno ha soportado. ¡Acordaros! cuando lleguéis al final de vuestros días aquí en la Tierra y alcancéis el gran Empíreo, allí seréis todos juzgados y condenados.
Hace muy poco tiempo, conoció el Ser Humano la Primera Guerra Mundial, año 1914.
Luego, a los pocos años, se produjo la Segunda, y para poder concluir aquella escaramuza, se emplearon de la manera más miserable y cobarde, bombas atómicas en Hiroshima, 5 de Agosto de 1945, y tres días después en la ciudad de Nagasaky.
Tristes recuerdos para quienes amamos la verdadera Paz y deseamos que la felicidad esté siempre con los Hombres de buena voluntad.
Desde entonces, silenciosa y con una natural desesperación y frialdad, no ha cesado el nativo de buscar la manera más intrigante de dañarse y eliminarse mutuamente.
Acción prohibida cabalmente, no por las propias religiones que se conocen, sino por la Creación Universal del Gran Paraíso o divino y majestuoso Nirvana.
No obstante, se halla en puertas el momento creado por los propios terrenales.
La destrucción de las grandes potencias es inminente, indica Saint Germain. El desprecio humillante, que manifiestan algunos sectarios gobernantes, es inadmisible, ilógico y totalmente imperdonable. 114 Un jardín tan hermoso como es el Planeta Tierra, lo desean unos y otros para utilizarlo y convertirlo en sendas de sangre, vertidas de manera cruel, por quienes se estiman dueños y señores de sus territorios, cuando en realidad son unos y otros, insignificantes mortales, ante los Ojos del Gran Imperio Universal.
Todo lo han “escrito” los mismos gobernantes.
Las muertes se contarán por millares desde una determinada fecha y todo continuará insostenible por culpa de la despreciable arrogancia de algunos mandatarios, hasta que llegue el año deseado por todos, que proporcionará la absoluta y digna libertad, aunque de manera lenta, según afirma el propio Saint Germain.
Luego, conocerá el Hombre la Gran Época Dorada, prometida al principio del Génesis dentro de esta nueva forma de vida que corresponde a la de Aquarius. - ¡De esta inútil Guerra de las Religiones, que habéis emprendido inútilmente, todos seréis vencidos!, dice el Maestro.
Pedirán los culpables vanamente perdón al Gran Creador del Universo, que es eterno, inmenso e invencible. Muchísimos serán después, los que le rueguen clemencia a Él y a los Maestros Ascendidos de Luz.
Los culpables como siempre ha ocurrido y continuará sucediendo, sus espíritus serán disgregados y pulverizados eternamente para que después de muertos, sus almas no repitan historias espeluznantes y horrendas.
En la Tierra de Promisión, prometida por Dios al pueblo de Israel, tiene que reinar para siempre la verdadera paz, que precisa el oriundo para ser feliz eternamente.
En la fecha mencionada, irá conociendo el Ser Humano, el resultado de esta Profecía, transcrita por el Maestro de Luz Llama Violeta Saint Germain, y escrita en este libro por L. P.
Sagrera para la posteridad.
Saint Germain es en estos momentos la magna sabiduría y generosidad, y la verdadera Luz otorgada por el Gran Creador, a favor y en bien del Hombre que habita el Planeta.
Es el redentor de la Gran Era de Aquarius, que finalizará según está escrito en el Gran Arcano, en el año 4110.
Luego deberá ser otro Maestro ascendido quien continúe esta tan difícil odisea infinita.
Estos son los grandes principios de la Obediencia Universal, desconocidos totalmente por el Ser Humano.
El Trono Eterno, es concedido en estos albores al excelso Saint Germain, quien se encargará con toda seguridad de que a no tardar reine la cordura entre diferentes religiones, y sea el propio Hombre, al darse cuenta de los aterradores desastres que comete, quien los dé por concluidos.
Al Maestro se le ha asignado el epíteto del “Gran Artífice” de este tiempo de cambios, ya relatados al principio del Génesis.
La Luz Violeta del eminente Maestro pertenece a una Fraternidad de unión y amor entre hermanos. Al finalizar el año 2005, profetiza, que desaparecerán las embravecidas ansias de darse muerte unos con otros.
Sin embargo, los años que precedan al 2005 sobrevendrán crueles, tormentosos y difíciles momentos para el Ser Humano.
Los fanáticos serán los que experimentarán mayor sufrimiento.
Los que tengan hambre de Paz y Amor serán elegidos y recomendados por el Maestro.
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